GRECIA y DINAMARCA. Desde Dinamarca reino independiente, hasta la instauración de la Casa Real danesa en Grecia. Parte 3.

Tras la instauración en Dinamarca de la Casa de Schleswig-Holstein-Sondeburg-Glücksburg, que sería denominada Glücksburg, rama menor de la Casa de Oldenburg, con Cristian IX –el suegro de Europa-, se verá como parte de su descendencia, tomará el camino de Grecia, para buscar la vía de los Mountbatten, que nos conducirá a Felipe de Edimburgo, príncipe consorte de la reina Isabel II del Reino Unido, abandonando la vía danesa, que hasta hoy y desde Cristian IX ha tenido los siguientes monarcas: Federico VIII (1906 a 1912) -hijo mayor de Cristian IX-, Cristian X (1912-1947), Federico IX (1947-1972) y Margarita II (1972 hasta hoy), todos de la Casa Glücksburg, y transmitida la corona por la vía paterno filial hasta hoy..

Cristián IX buscó sin éxito la mano de su prima tercera, la reina Victoria del Reino Unido, comprometiéndose más tarde con Luisa Guillermina de Hesse-Kassel, con la que contrajo matrimonio en 1842. Luisa Guillermina era su prima segunda, hija de la princesa Luisa Carlota de Dinamarca y sobrina de Cristian VIII de Dinamarca, lo que influyó decisivamente en el nombramiento de su marido Cristian -Federico VII no tuvo herederos, terminando con él la Casa de Oldemburgo en Dinamarca– como heredero a la corona danesa, por delante de sus hermanos mayores, además del hecho de que hubiera sido nieto prohijado del rey Federico VI y su mujer María Federica de Hesse-Kassel.

Del matrimonio de Cristian IX y Luisa Guillermina nacieron y llegaron a la edad adulta 6 hijos:

Federico VIII rey de Dinamarca, casado con Luisa  Eugenia Bernardotte de Suecia y Noruega.

Alejandra Carolina, reina consorte del Reino Unido por su matrimonio con Eduardo VII rey, hijo de la reina Victoria del Reino Unido.

Cristián Guillermo Fernando Adolfo Jorge, que ocuparía el trono griego como Jorge I de Grecia, que casó con la Gran duquesa Olga Konstantinova, mieta del zar Nicolás I.

María Sofía Federica Dagmar, que sería emperatriz consorte de Rusia por su matrimonio con el zar Alejandro III, bautizada en ese país como María Fiódorovna Románova.

Thyra, princesa de Hannover, por su matrimonio con Ernesto Augusto de Hannover, a pesar de que había tenido un hijo ilegítimo previamente con un teniente del ejército danés, Vilhem Frimann Marcher ¡Ay la tenientada! Qué sinvivir…

Valdemar de Dinamarca casado con María de Orleans, hija del príncipe Roberto de Orleans y de la princesa Francisca de Orleans, duques de Chartres.

Cristian IX de Dinamarca y su familia.

Tras la muerte de Federico VII, el 15 de noviembre de 1863, Cristian le sucedió en el trono como Cristian IX, reinando entre 1863 y 1906. Dinamarca estaba inmersa en una crisis notable por el control y el estatus de Schleswig y Holstein, dos provincias en el sur de Dinamarca que formaban el ducado de ese nombre y que eran de su propiedad por familia. Tuvo el monarca que bregar con las dos guerras de Schleswig y Holstein, por las que finalmente estos ducados fueron separados, entrando en la disputa por ellos toda Europa, pasando primero, ambos a provincias de Prusia en 1867,  llevándose a cabo en 1920, tras la Primera Gran Guerra, un plebiscito para conocer los deseos de la población de Schleswig central y septentrional, pasando estas regiones a Dinamarca nuevamente. Tras la segunda Gran Guerra y tras la tutela temporal británica, Schleswig y Holstein formaron uno de los estados de Alemania occidental, y posteriormente de la federación alemana actual.

Schleswig y Holstein al sur de la actual  Dinamarca pertenecientes hoy a Alemania.

La reina Luisa  Guillermina de Hesse-Kassel murió el 29 de septiembre de 1898 cerca de Copenhague, falleciendo Cristian IX  8 años más tarde, a los 87, tras un reinado de 42 años y 75 días, en enero de 1906.

Tras la muerte del rey, el príncipe heredero Federico, ascendió al trono como Federico VIII de Dinamarca de la Casa Glücksburg, que reinó de 1906 a 1912.

Otros tres hijos de Cristian IX, Alejandra -en el Reino Unido-, Jorge -en Grecia- y Dagmar -en Rusia-, también fueron monarcas.

La mayoría de las familias reales reinantes y ex reinantes de Europa son descendientes directos de Cristián IX de Dinamarca, y la mayoría de los monarcas europeos actuales descienden de él:  la reina Margarita II de Dinamarca, la reina Isabel II del Reino Unido y su hijo Carlos III, el rey Felipe de Bélgica, el rey Harald V de Noruega, el rey Felipe VI de España y el Gran Duque Enrique de Luxemburgo. También el que fuera consorte real, príncipe Felipe de Edimburgo, la reina Sofía de España, siendo descendientes agnáticos de Cristián IX, Constantino II de Grecia y el rey Miguel I de Rumanía .

*Sucesión agnática se refiere a sistemas de sucesión en donde la mujer no puede recibir la corona NI trasmitir los derechos a sus descendientes varones. Un agnado es un heredero que rompe la línea de sucesión masculina. Cognático es un sistema de sucesión en el que la vía de la mujer es tan válida como la del varón..

*Parentesco agnaticio, en el Derecho romano es la relación jurídica que se establece entre el  Pater Familias y los que de él dependen, incluyendo los hijos adoptivos, esposas…

Caída de Constantinopla en 1453.

Grecia había estado dominada por el Imperio otomano desde el siglo XV, algunas décadas antes de la toma de Constantinopla en 1453 por Mehmet II. ​Durante los siglos siguientes, hubo insurrecciones griegas esporádicas e infructuosas contra el dominio otomano, que terminaron con ominosos resultados. En 1814, se fundó la organización secreta Filiki Etería –Sociedad de Amigos– con el objetivo de liberar Grecia de los otomanos, alentada desde los países occidentales y centrales europeos. La insurrección fue planeada para el 18 de abril de 1821 –25 de marzo de 1821 en el calendario juliano, que continúan utilizando muchos ortodoxos, día de la Fiesta de la Anunciación para esos cristianos-. Los planes de la Filikí Etería fueron descubiertos, lo que obligó a adelantar la revolución. Comenzó el 6 de marzo de 1821 en los principados del Danubio, debiendo pedir el sultán otomano ayuda a su vasallo egipcio Mehmet Alí, quien envió a su hijo Ibrahim Bajá con una fuerte flota y ejército, que puso la mayor parte de la península griega bajo control egipcio.

En ese momento, tres grandes potencias: Rusia, Gran Bretaña y Francia, decidieron intervenir enviando sus fuerzas navales a Grecia en 1827. Las flotas europeas aliadas interceptaron la combinada otomana-egipcia, destruyéndola en la Batalla de Navarino, lo que sirvió para que los componentes de Filikí Eteriá acicatearan a los griegos para retomar la revolución. En 1828, el ejército egipcio de ocupación se retiró bajo la presión de una fuerza expedicionaria francesa, y los revolucionarios griegos procedieron a retomar el centro de Grecia. Rusia invadió parte del Imperio Otomano y le obligó a aceptar la autonomía griega en el Tratado de Adrianópolis en 1829.  Grecia fue finalmente reconocida como un estado independiente bajo el Protocolo de Londres en febrero de 1830. En 1832, tras dos años de gobierno de condes griegos, en la Conferencia de Londres y el Tratado de Constantinopla, se designó al príncipe Otón de Baviera -por entonces Baviera era un reino- como el primer rey de Grecia, subiendo al trono con el nombre de Otón I, con 17 años.

Otón I de Grecia de la Casa de Wittelsbach.

Llegó a Grecia acompañado de asesores bávaros y de 3.500 soldados. Hasta 1835 gobernó bajo un Consejo de regencia compuesto por funcionarios bávaros, lo que fue bastante impopular, siendo conocido este período como la bavarocracia. En 1837, y ante la insistencia del Reino Unido y Francia, fueron sustituidos los ministros bávaros por ministros griegos, aunque los de Baviera continuaron ocupando altos puestos de la administración y el ejército, lo que hacía persistir el malestar del pueblo.

La impopularidad del rey fue aumentando, por las subidas continuas de impuestos, y por su negativa a renunciar a la religión católica en favor de la ortodoxa. Esto, unido a la falta de herederos con Amalia de Oldenburg, y la constante injerencia en los asuntos internos de Grecia de las potencias que lo habían coronado, contribuyó a aumentar el desdén del pueblo por su rey.

Desde 1854 a 1857 los británicos y franceses ocuparon El Pireo para impedir la intervención griega a favor de Rusia en la guerra de Crimea. En 1861, un estudiante intentó asesinar a la reina Amalia.

Otón I, abdicó -o fue depuesto- en octubre de 1862, tras varios intentos de derrocamiento por parte de revolucionarios griegos, siendo además aconsejado para que tomara esa decisión por las potencias que le sostenían, por lo que renunció a la corona, retirándose con su mujer a su Baviera natal.

Jorge I de Dinamarca Rey de los Helenos  de la Casa Glücksburg.

Jorge de Dinamarca, por nacimiento príncipe Christian Vilhem Ferdinand Adolf Georg de Schleswig-Holstein-Sondeburg-Glücksburg, segundo hijo varón de Cristian IX de Dinamarca, llamado príncipe Vilhem -Guillermo- hasta su ascenso al trono griego, de la Casa de Glücksburg, con solo 17 años, fue elegido rey por la Asamblea Nacional griega, tras la abdicación/deposición del anterior monarca Otón I de origen bávaro de la Casa de Wittelsbach, subiendo al trono con el nombre de Jorge I.

Su elección fue propuesta y apoyada por Reino Unido, el Imperio ruso y el Segundo Imperio francés, convirtiéndose en monarca de Grecia desde1863 a 1913, el más largo de la historia moderna de Grecia, caracterizándose su reinado por las incorporaciones territoriales a Grecia, y su crecimiento en importancia en la Europa anterior a la Primera Guerra Mundial. Jorge I fue asesinado durante la primera guerra de los Balcanes (1912-1913). Desde entonces, y en contraste con su reinado, los de sus sucesores resultaron cortos e inestables.

Cuando en 1852, el príncipe Cristian -padre de Jorge- fue designado heredero al trono de Dinamarca, todos los miembros de su familia se convirtieron en príncipes y princesas de ese país. Jorge comenzó su carrera en la Marina Real de Dinamarca, que tuvo que abandonar cuando fue elegido Rey de los Helenos el 30 de marzo de 1863 ascendiendo al trono siete meses y medio antes que su padre, que se convirtió en rey de Dinamarca el 15 de noviembre de ese mismo año.

Jorge, no fue la primera opción del pueblo griego tras la deposición de Otón I, habiendo rechazado previamente a Leopoldo de Baviera –hermano de Otón I-. Muchos griegos, buscaban lazos más cercanos con el Reino Unido -gran potencia ya en esa época-, deseando que su rey fuera el segundo hijo de la reina Victoria, Alfredo, duque de Edimburgo.

La Conferencia de Londres de 1832 prohibió que cualquiera de las familias reinantes en las grandes potencias asumiera la corona griega, oponiéndose además la propia reina Victoria en un gesto de equilibrio en tiempos difíciles. Los griegos insistieron en celebrar una votación, en la que el príncipe Alfredo recibió más del 95 % de los 240. 000 votos, pero no hubo opción.

Finalmente, los griegos y las grandes potencias dirigieron su elección hacia el príncipe Guillermo –Jorge– de Dinamarca. Fue elegido de forma unánime por la Asamblea griega, y fue proclamado Rey de los Helenos. En su entronización en Copenhague, a la que asistió una delegación griega liderada por el almirante y primer ministro Kanaris, se anunció que el gobierno británico cedería a Grecia las islas Jónicas, en honor a su nuevo monarca, que hasta entonces habían sido un protectorado británico.

Dispuesto a no repetir los errores de su predecesor, Jorge -Guillermo- aprendió griego, dejándose ver informalmente a menudo por las calles de Atenas, buscando asegurarse de que no se le percibiera influenciado por los consejeros daneses. ​

Políticamente, el nuevo rey decidió que se elaborara una Constitución con prontitud, ya que su estudio y discusión en la Asamblea se eternizaba; así, el 19 de octubre de 1864 envió una petición a la misma, explicando que había aceptado la corona con la convicción de que se llegaría a una nueva constitución, y que, en caso de que no fuera así, sentiría “la perfecta libertad de adoptar aquellas medidas que la decepción de mis esperanzas pudiera sugerirme”. No quedó muy claro la literalidad de sus palabras, si se refería a abandonar la Corona o a imponer una Constitución, pero ya que cualquiera de estos eventos era indeseable, la Asamblea llegó a un acuerdo rápidamente.

El 28 de noviembre de 1864 juró defender la nueva constitución, que creaba un parlamento unicameral con representantes elegidos por sufragio directo, universal y secreto, aunque masculino. Se constituyó una monarquía constitucional, con Jorge I como rey legítimo. Eligió como título nobiliario para identificar al jefe de la nueva Casa Real, no el usado por el anterior monarca, REY DE GRECIA, sino que optó por usar el gentilicio Helenos, REY DE LOS HELENOS, creándose la nueva Casa Real Helénica.

Música: Folclore griego clásico.

To be continued in part  4