MONARCAS GRIEGOS DESDE JORGE I DE DINAMARCA hasta el fin de la monarquía desplazada por la Dictadura de los coroneles. Parte 4.
Del matrimonio de Cristian IX y Luisa Guillermina Hesse-Kassel de Dinamarca nacieron y llegaron a la edad adulta 6 hijos:
Federico VIII rey de Dinamarca, casado con Luisa Eugenia Bernardotte de Suecia y Noruega.
Alejandra Carolina, reina consorte del Reino Unido por su matrimonio con Eduardo VII rey, hijo de la reina Victoria del Reino Unido.
Eduardo VII del Reino Unido y Alejandra de Grecia y Dinamarca.
Cristián Guillermo Fernando Adolfo Jorge, que ocuparía el trono griego como Jorge I de Grecia, que casó con la Gran duquesa Olga Konstantinova, nieta del zar Nicolás I.
Jorge I Rey de los Helenos y Olga Konstantinova Romanova.
María Sofía Federica Dagmar, que sería emperatriz consorte de Rusia por su matrimonio con el zar Alejandro III, bautizada en ese país como María Fiódorovna Románova.
Alejandro III , zar de Rusia y Dagmar de Grecia y Dinamarca.
Thyra, princesa de Hannover, por su matrimonio con Ernesto Augusto de Hannover, a pesar de que había tenido un hijo ilegítimo previamente con el teniente del ejército danés, Vilhem Frimann Marcher ¡Ay la tenientada! Qué sinvivir…
Valdemar de Dinamarca casado con María de Orleans, hija del príncipe Roberto de Orleans y de la princesa Francisca de Orleans, duques de Chartres.
Internacionalmente, Jorge I Rey de los Helenos mantuvo unos fuertes lazos con su cuñado, el príncipe de Gales Alberto Eduardo -más tarde Eduardo VII del Reino Unido-, casado con su hermana Alejandra.
Durante un viaje a Moscú para asistir a la boda de su hermana Dagmar con el zar Alejandro III, conoció a la gran duquesa Olga Konstantínova Románova con la que contrajo matrimonio en San Petersburgo en octubre de 1867, teniendo ocho hijos:
Constantino de los Helenos, que se casó con la princesa Sofía de Prusia y en 1913 heredó la corona de Grecia como Constantino I.
Constantino de Grecia y Dinamarca y Sofía de Prusia.
Príncipe Jorge de Grecia, que se casó con la princesa María Bonaparte.
Jorge de Grecia y Dinamarca y María Bonaparte.
Princesa Alexandra de Grecia, que contrajo matrimonio con el gran duque Konstantin Nikoláyevich de Rusia.
Alejandra de Grecia y Dinamarca y gran duque ruso Konstantin Nikoláyevich.
Príncipe Nikolaos de Grecia casado con la gran duquesa Helena de Rusia. Padre de la Princesa Marina de Kent y de la Princesa Olga de Yugoslavia.
Príncipe Nikolaos de Grecia y Dinamarca y gran duquesa rusa Helena Vladimirovna.
Princesa Marie de Grecia, esposa del gran duque Jorge Mijáilovich de Rusia que fue asesinado por los bolcheviques en 1919, casándose nuevamente con el almirante Pericles Ioannidis.
Princesa Marie de Grecia y Dinamarca y gran duque Jorge Mijáilovich de Rusia.
Princesa Olga de Grecia. Murió a los seis meses de nacer.
Príncipe Andrés de Grecia que se casó con la princesa Alicia de Battenberg, padres de Felipe de Edimburgo.
Príncipe Andrés de Grecia y Dinamarca y princesa Alicia de Battemberg.
Príncipe Cristóbal de Grecia, casado en primeras nupcias con la norteamericana, Nancy Stewart Worthington Leeds, a la que se le otorgó el título de princesa Anastasia de Grecia y Dinamarca, y tras su muerte, el príncipe volvió a contraer matrimonio con la Princesa Francisca de Orléans.
Príncipe Miguel de Grecia y Dinamarca y Nancy Stewart Worthington Leeds. Abajo su segunda mujer princesa María Francisca de Orleans.
Entre 1864 y 1874, Grecia tuvo 21 gobiernos diferentes, el más largo de los cuales duró año y medio. En julio de 1874, Charilaos Trikoupis fue detenido y más tarde puesto en libertad, por opinar en un artículo periodístico, que la culpa de la inestabilidad de los gobiernos era del rey, por permitir que gobiernos de minorías gobernaran apoyados por otros del mismo empaque. Al año siguiente el rey confió a Trikoupis la formación de gobierno, declarando que, en el futuro, el líder del partido mayoritario en el parlamento, sería primer ministro.
A lo largo de la década de 1870, Grecia mantuvo la presión sobre el Imperio otomano, buscando su expansión territorial hacia Epiro y Tesalia, intentando unirse a los rusos -la hermana de Jorge I, Dagmar, era nuera del zar Alejandro II- durante la guerra ruso-turca de 1877 y 1878, pero las grandes potencias no permitieron esa unión.
En la reunión para los acuerdos de paz al final de esta guerra en Berlín, en 1878, Grecia planteó una reclamación sobre Creta, Epiro y Tesalia. Las fronteras no se habían terminado de fijar en junio de 1880, fecha en la que les fue ofrecida por británicos y franceses una propuesta muy favorable para los intereses griegos que no fue aceptada por los otomanos.
Uno de los anhelos básicos que tuvo Jorge I en política exterior, fue el intento de recuperar Creta para Grecia.
Creta -primer asentamiento de la civilización minoica, que dio paso a la micénica, y más tarde al establecimiento de una talasocracia-, fue conquistada por Alejandro Magno, pero tras la decadencia griega, la isla fue conquistada por Roma en el año 67 a.C., constituyendo una provincia romana. Tras la división del Imperio romano en 395 d.C. en tiempos de Teodosio, quedó en manos del Imperio bizantino o romano de Oriente, gobernado por su hijo Arcadio, lo que devolvió a la isla cierta relevancia, dada su posición clave para el control del mar Egeo.
*Nota mitológica. Fue en Creta donde la titánide Rea, hija de Urano y Gea, y esposa y hermana de Cronos (el que se comió a sus hijos Deméter, Hades, Hera, Hestia y Poseidón recién nacidos, excepto a Zeus, ya que fue engañado por su mujer Rea en esta ocasión, dándole para comer una piedra envuelta en paño en lugar de a su hijo Zeus). Rea dejó a Zeus en el monte Ida, en el centro de Creta. También Zeus, tras raptar a Europa, la llevó a la isla, engendrando en ella tres hijos: Mino el padre del Minotauro, Radamantis y Sarpedón.
En el siglo IX cayó en poder de un grupo de musulmanes andalusíes, primero desterrados de Córdoba a Alejandría, y posteriormente expulsados de Egipto, siendo trasladados a Creta. Los musulmanes cordobeses cultivaron la isla, proclamaron rey a uno de los suyos, y armaron una flota con la que asaltaron las islas cercanas y las próximas a Constantinopla.
El dominio musulmán en Creta duró hasta 961, cuando el emperador bizantino Romano II envió al general Nicéforo Focas a reconquistar la isla, en el 960, reconquistándola. Cuando los componentes de la 4ª Cruzada, en vez de conquistar Tierra Santa, se apoderaron de Constantinopla, instituyendo durante 57 años -de 1204 a 1261- el Imperio Latino, la isla fue adjudicada a Bonifacio de Monferrato -marqués del mismo nombre- quien rápidamente la vendió a Venecia, que la convirtió en el punto estratégico clave de sus rutas comerciales en el Mediterráneo oriental, siendo veneciana, hasta que fue arrebatada por los otomanos entre 1645 y 1669, perteneciendo a este imperio, hasta la tutela griega impuesta por las potencias en 1898, siendo por último recuperada por Grecia en 1913.
Bonifacio de Monferrato nombrado líder de la Cuarta Cruzada.
Creta.
La guerra greco-turca de 1897 o guerra de los Treinta Días, fue un conflicto bélico entre Grecia y el Imperio otomano cuya causa inmediata fue la cuestión sobre el estado de la provincia otomana de Creta, cuya mayoría griega deseaba la unión con Grecia.
La guerra acabó con la derrota griega, que no estaba preparada para un conflicto como aquel. A pesar de la victoria otomana en la guerra, al año siguiente se estableció un Estado cretense autónomo, bajo la soberanía otomana, pero con el hijo del rey Jorge I, el príncipe Jorge de Grecia y Dinamarca como Gobernador General, impuesto por las grandes potencias a los otomanos. Más tarde, los otomanos ofrecieron a Grecia toda Tesalia y una parte de Epiro, que fueron aceptadas por los griegos, aunque con reticencias.
A la muerte de la reina Victoria del Reino Unido, le sucedió Eduardo VII, amigo y cuñado de Jorge I, que le venía apoyando en sus pretensiones sobre Epiro, Tesalia y Creta. El príncipe Jorge, dimitió como Gobernador General de Creta en 1906, por una campaña en su contra del líder del parlamento cretense, Eleftherios Venizelos.
La Revolución de los Jóvenes Turcos -antesala de la nueva Turquía y fin del Imperio otomano, iniciada por la influencia de la Ilustración francesa- de 1908, pareció un buen momento para la reivindicación cretense para su unión a Grecia, pero apenas hubo reacción por parte del gobierno griego en aquel momento.
Un grupo de oficiales del Ejército griego formó una Liga Militar que intentó dar un golpe de Estado, pero el rey insistió en apoyar las decisiones del Parlamento heleno, debiéndose convocar nuevas elecciones a la Asamblea cretense, convirtiéndose Eleftherios Venizelos en primer ministro de un gobierno en minoría, debiendo solo un mes más tarde, convocar unas nuevas elecciones, que ganó por mayoría aplastante, al no presentarse la oposición.
El heredero de Jorge I, Constantino, fue nombrado nuevamente Comandante en Jefe del Ejército, cargo que ocupaba con anterioridad, y del que había sido separado en el Golpe de la Liga Militar. Bajo su cercana supervisión y la de Venizelos, además de la ayuda británica y francesa, el Ejército recibió un nuevo equipamiento y adiestramiento y se encargaron nuevos barcos para la Armada. Mientras tanto, a través de medios diplomáticos, Venizelos se unió a los países cristianos de los Balcanes para intentar atacar a los otomanos.
Montenegro declaró la guerra a Turquía, el 8 de octubre de 1912, uniéndose Serbia, Bulgaria y Grecia, en la que se conocería como Primera Guerra de los Balcanes. Las ahora bien entrenadas tropas griegas, con una fuerza de 200.000 hombres, lograron la victoria, llegando a Tesalónica el 9 de noviembre de 1912.
El rey Jorge I dado a pasear por las calles sin apenas protección, fue asesinado en Salónica el 18 de marzo de 1913 de un disparo efectuado por Alexandros Schinas, no habiendo podido saberse la motivación, ya que el asesino se tiró por una ventana de la comisaría donde estaba detenido y murió.
Asesinato y entierro de Jorge I en 1913.
Creta, aunque desligada de la tutela efectiva turca desde 1898, no se integró a Grecia hasta 1913, tras la Primera Guerra de los Balcanes y los posteriores acuerdos para los ajustes territoriales en la zona balcánica.
Mustafa Kemal Atatürk puso fin a la ocupación progresiva de Anatolia por fuerzas europeas, declarando en 1923 el fin del Imperio Otomano, constituyendo el Estado de Turquía.
Mustafa Kemal Atatürk.
A diferencia de su padre el rey Jorge I, su hijo y sucesor Constantino I, demostró estar menos dispuesto a aceptar los consejos de sus ministros y de las tres potencias protectoras de su país, el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda, el Imperio ruso y la República francesa.
Constantino I tuvo con su mujer Sofía de Prusia, 6 hijos:
Jorge II de Grecia, rey de los helenos entre 1922 y 1924 y de 1935 a 1947 casado con Isabel de Rumanía.
Jorge II rey de los Helenos e Isabel de Rumanía.
Alejandro I de Grecia, rey de los helenos entre 1917 y 1920 que se casó con Aspasia Manos.
Alejandro II rey de los Helenos y Aspasia Manos.
Elena de Grecia, reina madre de Rumanía que contrajo matrimonio con Carlos II de Rumanía, que se divorció de ella, abdicó y posteriormente recuperó el trono. Fueron padres de Miguel I de Rumanía.
Elena de Grecia y Dinamarca reina madre de Rumanía y Carlos II de Rumanía.
Pablo I de Grecia, rey de los helenos de 1947 a 1964 casado con Federica de Hannover.
Pablo I rey de los Helenos y Federica de Hannover.
Irene de Grecia, duquesa de Aosta que se casó con Tomislav II rey de Croacia.
Princesa Irene de Grecia y el rey Tomislav II de Croacia.
Catalina de Grecia casada con Richard Brandam.
Princesa Catalina de Grecia y Dinamarca y Richard Brandam.
Constantino I reinó entre 1913 y 1917, abandonando el poder, pero sin abdicar, presionado por el Alto Comisario de los Aliados en Atenas. Le sucedió su segundogénito Alejandro I que reinó desde 1917 a 1920, año de su fallecimiento. El primogénito había sido desestimado al mismo tiempo que su padre, por las grandes potencias en ese momento. Volvió Constantino I a reinar de 1920 a 1922 tras la muerte de Alejandro, debiendo abdicar nuevamente presionado por las Fuerzas Armadas. Le sucedió su primogénito Jorge II, que reinó en un primer período entre 1922 a 1924, año en que se proclamó la República, que sería el régimen político en Grecia hasta 1935, fech aen la que volvió a ocupar el trono Jorge II hasta 1947.
En octubre de 1935, el general Kondilis derrocó el gobierno de la república con un golpe militar y se proclamó regente. Se celebró entonces un plebiscito para que el pueblo se pronunciara sobre la restauración de la monarquía. La restauración fue aprobada por un 95 % de votos favorables. Jorge II se reincorporó al trono que ostentó hasta 1947, conviviendo con la dictadura de Ioannis Metaxas hasta 1941, fecha en la que tuvo que huir a Creta, al ser Grecia invadida por Mussolini, debiendo viajar posteriormente a Egipto, al ser bombardeada Creta por los alemanes, siendo más tarde despachado a Londres por el rey egipcio FaruK I. Aunque nominalmente continuó siendo el jefe del Estado Heleno hasta 1947, en 1945, hubo que hacer un nuevo referéndum sobre el mantenimiento de la monarquía. Jorge II regresó a consecuencia del resultado positivo del referéndum, muriendo en 1947 de arterioesclerosis, siendo sucedido por su hermano menor Pablo, que subió al trono como Pablo I, que reinó de 1947 a 1964.
Pablo I que se había casado con Federica de Hannover tuvo tres hijos:
Sofía en 1938, que sería Sofía reina de España, mujer de Juan Carlos I, padres del rey Felipe VI, Constantino en 1940, que casado con Ana María de Dinamarca reinaría como Constantino II rey de los Helenos, e Irene en 1942.
Sofía de Grecia reina de España y Juan Carlos I rey.
Constantino II rey de los Helenos y Ana María de Dinamarca.
Princesa Irene de Grecia y Dinamarca.
El reinado de Constantino II entre 1964 y 1973, estuvo marcado por la inestabilidad política y por la Dictadura de los coroneles, que, con un golpe de estado en 1967 depusieron al gobierno, estableciendo una junta militar gubernamental. El juramento de fidelidad que Constantino, como rey y jefe de Estado, pidió a la junta militar, le supuso un fuerte resentimiento popular. En diciembre de ese año, el rey fracasó en su intento de derrocar a la junta con un contragolpe militar, y él y su familia debieron marchar al exilio. Seis años más tarde, en 1973, el gobierno militar griego depuso a Constantino II como rey, hecho confirmado por un referéndum nacional en 1974, en el que la opción de la república obtuvo la mayoría de los votos. Esto significó el fin de la monarquía griega, aunque Constantino II no haya renunciado a sus derechos dinásticos.
No recuerdo quien dijo, que, la mejor herramienta que debe llevar un rey griego consigo, tras ser ascendido al trono, es la maleta.
Música: Giovanni Battista Pergolesi. Stabat Mater 1ª parte; Nathalie Stutzmann, director, Philippe Jaroussky contratenor y Emöke Barath, soprano. Orfeo 55.
To be continued in part 5 and last.
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Me llamó la atención el nombre “Aspasia”, pero no es tan extraño. Aspasia conquistó a Pericles y Sócrates. https://www.bbc.com/mundo/noticias-57077480
Efectivamente. Aspasia de Mileto. De hecho, con su segundo marido tras Lisicles, Pericles, tuvo su único hijo Pericles el joven.