EGIPTO: religión, dioses y culto a los muertos. Parte 1.
La concepción egipcia del universo se centró en Ma´at, una palabra que engloba los conceptos “verdad”, “justicia” y “orden”. Era el orden fijo y eterno del universo, tanto en el cosmos como en la sociedad humana. Existió desde la creación del mundo, y sin él, el mundo perdería su cohesión. En la creencia egipcia, el Ma’at estaba bajo constante amenaza de fuerzas del desorden, debiendo los dioses buenos -y los hombres- velar por el mantenimiento del orden, siendo esta meta la básica de la religión egipcia. Los egipcios debían mantener el Ma’at en el cosmos, pidiendo a los dioses a través de ofrendas y rituales que alejaran el desorden y perpetuaran los ciclos buenos de la naturaleza.
MA´AT con forma de diosa alada.
Aunque la representación de las numerosas divinidades existentes durante la historia de Egipto en época anterior al Imperio Antiguo, en los tres Imperios y en los Períodos Intermedios pudiera llevar a la consideración de estar ante una religión politeísta, se puede en realidad afirmar que su tendencia es constante al monoteísmo, por los principios que la animan, aunque no por sus innumerables representaciones.
Casi todas las opiniones cualificadas consideran a las muchas divinidades que existieron como atributos o intermediarios del Ser Supremo -el único Dios-. En la cúspide del panteón de los dioses estaba un Dios único, no creado, inmortal, engendrado por sí mismo desde la eternidad y de inescrutable esencia; es decir, se adoraba al Único y Originario por medio de formas de dioses que lo representaban a Él, al que por su voluntad resplandecía el Sol, la tierra estaba separada del firmamento y existía armonía en la creación.
Para hacerlo más comprensible y acercar al pueblo egipcio a la creencia en una sola divinidad, se representaron características del mismo y sus varias personificaciones; la imagen más perfecta de Dios fue el Sol con sus atributos de forma, luz y calor. El alma del Sol fue denominada Amón o Amón-Ra que significa sol oculto y el resto de las divinidades fueron miembros de su cuerpo.
RA en su barca solar.
AMÓN.
Aunque los cambios de dinastías llevaron consigo una afirmación -aunque divergente- del monoteísmo en las que el Ser Supremo iba afianzando su predominio sobre dioses menores, hubo tres revoluciones: la del rey Osiris, rey de Tebas en los años alrededor del 4200 a.C., que luego fue divinizado como el Dios de su nombre, la del rey Menes unificador del Alto y Bajo Egipto y la de Amenophis IV luego Akhenaton esposo de Nefertiti –bella entre las bellas– y padre de Tutankaton -luego Tutankamon- que cambió la capital de Tebas a Amarna, y sustituyó al Dios Amón por Atón. A su hijo Tutankamón, los sacerdotes de Amón le convencieron para devolver la capitalidad a Tebas y restaurar al dios Amón.
En la antigua teogonía, el Ser Supremo era único en esencia, pero no en su persona. No nacía de sí mismo para engendrar, sino que engendraba en sí mismo, y era al mismo tiempo Padre, Madre e Hijo de Dios, y ello sin salir de sí mismo. Las tres personas eran Dios en Dios y no dividían la naturaleza divina, sino que concurrían para la infinita perfección; de ahí la existencia de las conocidas Triadas cuya existencia no menoscababa la teoría de la unidad divina, sino que la reforzaba.
La Trinidad no fue el único dogma que conservó Egipto de su revelación originaria; en sus libros sagrados se encuentra el pecado original, la resurrección de la carne, la promesa de un dios redentor y la renovación de la humanidad.
TRIADA OSIRIS, ISIS y SU HIJO HORUS.
Cada provincia o nomo tenía su propia Triada; la Triada principal fue la de Abidos lugar sagrado para los habitantes de Egipto por tratarse del cementerio principal de los reyes de las primeras dinastías del Antiguo Egipto. Pertenecía al nomo VIII del Alto Egipto, cuya capital Thinis, se debía encontrar cerca, quizá en el actual emplazamiento de Girga y la Triada estaba compuesta por Osiris, Isis -su mujer y hermana- y Horus -hijo de ambos-. Abidos se convirtió en la ciudad santa de Osiris, porque según la leyenda allí se encontraba la cabeza de la diosa Isis. Fue la triada más popular y conocida, ya que Osiris -hijo de Ra y hermano del malvado Seth– representaba la personificación del bien, y presidía el tribunal supremo que juzgaba el alma de los difuntos en el rito de la psicostasia -pesada del alma-. Otras conocidas y populares triadas fueron la de Menphis –Pthat, Sekhmet y Nefertum-, la de Tebas –Amón, Mut y Khonsu-, la Tríada de Edfu –Horus, Hathor y Harsomtus-, la de Elefantina –Jnum, Satis y Anukis– y la de Dendera –Horus, Hathor y Aqh-.
Principales Triadas.
El Papiro de Ani: capítulo 125 del Libro de los Muertos.
La representación de las divinidades fue inicialmente zoomórfica, evolucionando después hacia la antropomórfica, manteniendo algún rasgo animal, o no. Había dioses locales en cada nomo, y dioses cósmicos comunes para todas las provincias.
Algunos de los principales Dioses de Egipto fueron:
RA: fue la divinidad principal. Representaba al sol mediante un disco solar o una figura humana con un disco solar encima de la cabeza.
Para viajar por el cielo se creía que lo hacía en barca, de Oriente a Occidente en un viaje de 24 horas; de día iba en una barca grande conocida como “Mandjet” y por la noche en una barcaza pequeña llamada “Mensenktet”. Según el momento del viaje, se manifestaba en forma de tres entidades diferentes: al amanecer era Jepri; al mediodía, Horajti y al anochecer, Atum.
RA.
Viaje nocturno de Ra, remolcado en su barca por chacales y ureos.
Detrás las figuras momiformes de Horus y Thot.
AMÓN: se le representó con dos plumas de halcón y también con un ganso y un carnero. Fue el dios del Imperio y el patrono de la monarquía.
AMÓN.
AMÓN RA: sincretismo o unión del dios Amón y Ra. Fue considerado el dios supremo en la época de mayor esplendor tebano.
AMON RA.
ANUBIS: representado como un hombre con cabeza de chacal o perro. Fue quien facilitaba la ascensión del muerto hacia la región celestial o la denegaba. Patrón de los embalsamadores. Participaba en la pesada del alma.
ANUBIS AYUDANDO AL EMBALSAMAMIENTO.
ATÓN: nombre asignado al disco solar originario de Heliópolis -capital del nomo XIII del Bajo Egipto-. Atón era una deidad solar del Antiguo Egipto, que representaba al disco solar en el firmamento, siendo considerado la fuerza vital y el espíritu que alentaba la vida en la tierra.
ATÓN.
En los primeros tiempos se representó como un hombre con cabeza de halcón, y posteriormente como un disco solar del cual surgían rayos con manos extendidas hacia los creyentes, o sujetando signos de la vida.
Cuando el faraón Akenatón -padre de Tutankatón- trasladó la capital a Amarna, cambió el culto del Estado de Amón a Atón, considerando entonces a ATÓN el dios de bondad infinita, y el que vivificaba la Justicia y el Orden cósmico –Ma´at– favoreciendo a todos los hombres por igual. El soberano Akenatón se nombró su enviado, y su profeta en la tierra, y el único digno de inmortalidad.
Ajenaton, Nefertiti y Tutankaton adorando a Atón.
Su principal templo estuvo en la ciudad de AJETATÓN -El Horizonte de Atón-, en la actual Amarna.
HORUS: hijo de Isis y Osiris, representado con un halcón u hombre con cabeza de halcón. Es el Dios de la realeza y Señor del Cielo.
HORUS.
OSIRIS: señor del mundo subterráneo que contiene las semillas de la vida. Es quién protege a los difuntos en el más allá y preside el tribunal de 42 jueces que juzga a los muertos. Se le representó vendado, con los brazos cruzados sobre el pecho y con los dos atributos del faraón y una corona muy alta o gorro cónico flanqueado por dos altas plumas. Con barba puntiaguda y la cara de color verdoso.
OSIRIS.
Su hermano Seth lo mató y despedazó, usurpando su trono. La esposa de Osiris, Isis, recuperó y restauró el cuerpo de su esposo y concibió póstumamente a Horus. El resto del relato es para Horus, el producto de la unión de Isis y Osiris, quien al principio fue un niño vulnerable protegido por su madre, convirtiéndose después en el rival de Seth al trono que ocupó su padre. El conflicto, a menudo violento, terminó con el triunfo de Horus, que restauró la Ma´at tras el reinado de Seth, completando el proceso de resurrección de Osiris.
ISIS: hija de Gueb y de Nut y esposa de su hermano Osiris. Fue la Señora del amor, diosa de la fecundidad, de la alegría y de la feminidad triunfante. Se representó con una mujer con una silla en la cabeza (la silla es el jeroglífico que representa su nombre).
ISIS con su hijo Horus.
SETH: hermano de Osiris y deidad malvada. Fue el Dios del desierto, de las sequías, del caos y de la guerra. Se representó con un hombre vestido de guerrero. En el rostro tenía una especie de hocico curvo que sobresalía y orejas largas y puntiagudas que apuntaban hacia arriba.
SETH.
Música del Antiguo Egipto.
To be continued in part 2.
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Como siempre impartiendo conocimiento y descubriendo hechos para mi desconocidos.