Joaquín Sorolla. Sorolla y la moda. Parte 2.

En Asturias haciendo el camino, reduciendo ligeramente la tripa y ensanchando el alma.

Tras construir su casa madrileña, en noviembre de 1911, firmó un contrato con la Hispanic Society of America, para realizar catorce murales que deberían decorar las salas de la Institución, dedicados a las Regiones de España y Portugal,  de tres metros y medio de alto por catorce de largo cada uno. Necesitó casi todo el año  1912 para viajar por los dos países para bocetar paisajes y costumbres, ejecutando la obra entre 1913 y 1919 –siendo en 1914 nombrado Académico-, creando un magnífico monumento relacionado con España y Portugal; por esta obra recibió 150.000 dólares, regresando a Madrid donde sufrió un ictus hemipléjico, mientras pintaba en 1920 en su casa de Madrid a su amigp Pérez de Ayala, viviendo de ese modo los tres últimos años de su vida hasta su fallecimiento  en 1923, en su casa de Cercedilla.

Murales que decoran la Hispanic Society of America con algunos detalles.

En 1919 fue nombrado profesor de colorido y composición en la Real Escuela de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, cargo que prácticamente no pudo ejercer, siendo inaugurada su obra de la Hispanic Society en 1926, tres años después de su muerte.

El impresionismo español tuvo en Sorolla, la figura más influyente. Después de Goya no hubo en España ningún otro pintor tan importante en el siglo XIX; fue el artista que supo captar la luz del Mediterráneo de forma única.

MUSEO SOROLLA.Paseo General Martinez Campos, 37. Madrid.

El Museo Sorolla fue creado a petición de la viuda del pintor, Clotilde, quien en el año 1925 dictó testamento donando todos sus bienes al Estado para la fundación de un museo en memoria de su marido. El día 28 de marzo de 1931, se aceptó el legado de la viuda del pintor. El Museo, inaugurado en 1932, se ubicó en el edificio en el que el pintor tenía su casa y  taller, y que fue diseñado y construido por el arquitecto Enrique María Repullés.

Jardines de la Casa Museo Sorolla.

Entrada a la casa-museo.

Salón.

 

 

Taller del artista.

 

Joaquín Sorolla García, único hijo varón del matrimonio, fue el primer director del Museo hasta su fallecimiento en 1948, legando nuevos fondos al Estado, que fueron aceptados en el año 1951. La colección se ha ido ampliando posteriormente con compras.

Desde el año 1973 el Museo es estatal y depende del Ministerio de Cultura.

Sorolla y la moda

Del 13 de febrero al 27 de mayo el Museo Sorolla, de la calle General Martínez Campos y el Museo Thyssen Bornemisza madrileño, acogen simultáneamente la exposición Sorolla y la moda, que es una vía más de aproximación a la obra del artista, al que por otra parte le gustaba la moda de su época -final del siglo XIX y principio del XX-, especialmente la femenina, en un momento de gran sofisticación en las indumentarias de las personas de clase media y alta; la muestra reúne pinturas que proceden de museos y colecciones privadas junto a un número importante de vestidos, complementos y muebles, prestados a la exposición por instituciones y colecciones particulares.

El artista sentía gran fascinación por la representación de la ropa, especialmente  la de alta costura, ya que sentía que a través de la moda se podían señalar los cambios sociológicos y estéticos de una época, gustándole la representación de las telas, los diseños, los brocados  y los adornos, atención que mantuvo desde su niñez, ya que pudo verlo en su casa, al ser sus padres comerciantes de telas. Su matrimonio con Clotilde -procedente de la alta burguesía-, le permitió conocer de primera mano el entorno acomodado de la sociedad y las tendencias y estilos de la época.

El artista se convirtió de esta manera, en un notario de la vida social de la alta burguesía y un captador de tendencias, dando fe en sus obras de la evolución de la moda; Sorolla fue un magnífico intérprete  del retrato aristocrático de la época, transmitiendo la imagen de la sociedad de esos años, cumpliendo el cometido notarial de forma sobresaliente.

En sus viajes a París, recorría los mejores modistos, colecciones, y particulares, comprando aquellas prendas que fueran la máxima expresión de la vanguardia, pintando vestidos -ya sin corsés de ballenas y armazones que las mujeres más adelantadas desterraron-, buscando la elegancia combinada con la comodidad.

A través de una selección de retratos pintados entre 1890 y 1920, dibujó un minucioso recorrido por la vestimenta de ese período, levantando una panorámica que reflejó perfectamente la llegada de la modernidad a la sociedad, sugiriendo siempre a las modelos, que para los retratos, se vistieran con sus mejores trajes

Sorolla y la moda es una muestra de 72 pinturas y 60 vestidos y trajes y unos 70 entre sombreros, zapatos, mantillas, joyas, sombrillas y muebles, expuestos en las dos sedes señaladas.

Joaquín Sorolla Bastida. Paseo a la orilla del mar. 1909. Óleo  sobre lienzo. 205 x 200 cm.  Fundación Museo Sorolla, Madrid. A la derecha, vestido de día, 1904-1908. Algodón y encaje. Victoria and Albert Museum, Londres.

Joaquín Sorolla Bastida, Clotilde con traje gris, 1900. Museo Sorolla, Madrid. A la derecha, blusa y falda, hacia 1900-1914. Centro de Documentación y MuseoTextil, Tarrasa.

To be continued in part 3 and last.