Historia rápida de EGIPTO. Parte 2.

SEGUNDO PERÍODO INTERMEDIO: 1730 a. C. a 1550 a.C. circa.

Aproximadamente desde 1650 a.C. a 1550 a.C., comprendiendo desde la XIII a la XVII dinastías. Época oscura en la que la sucesión de faraones con poco tiempo de reinado y con poder sólo sobre algunas partes de Egipto, hicieron que en algún momento se simultanearan más de un faraón con el consiguiente caos administrativo.

La capital durante la dinastía XIII estuvo en Tebas, durante la XIV en Xois (en el delta), durante las XV y XVI en Avaris  -delta- y durante la XVII volvió de nuevo a Tebas.

Durante la dinastía XV sufrió Egipto la invasión de los reyes hicsos -reyes extranjeros llegados del cercano oriente- a los que se agrupa tradicionalmente en dos dinastías, la XV denominada «Hicsos Mayores» y la XVI, que recibe el nombre de «Hicsos Menores».

Las XIV, XV y XVI dinastías se desarrollan en el delta. La dinastía XVII con el primer faraón Intef, que sucedió al último faraón de la XIII en Tebas Sebekhetep IV, siendo ambas dinastías de etnogénesis similar, y desarrollando las dos su reinado desde Tebas. Un sucesor de Intef, Amosis I luchó y venció a los hicsos con Apofis II y Jamudy a la cabeza, expulsándoles de Egipto, destruyendo su capital Avaris y persiguiéndoles hasta Palestina.

IMPERIO NUEVO: 1550 a.C.-1070 a.C. Capitales Tebas y Aketaton (actual el-Amarna, durante el reinado de Amenhotep IV luego Ajenaton padre de Tutankamon).

Comenzó la XVIII dinastía con el faraón Amosis I que inició la reunificación, siguiendo las XIX y XX dinastías período denominado Ramesida (de los Ramses).

Los egipcios tuvieron veneración por dos grandes faraones que unificaron el país: Narmer, faraón del Imperio Antiguo en torno al 3100 a.C., y Amosis I, que unió un Egipto dividido en torno al 1550 a.C. y marcó el comienzo del Imperio Nuevo.

Cuando el joven Amosis I ascendió al trono, Egipto estaba en una gran crisis. Los intrusos procedentes de Oriente Próximo conocidos como hicsos, cuyo significado es «gobernantes extranjeros», se habían hecho con el delta del Nilo, asesinando al faraón Seqenenra Taa, padre de Amosis, y diezmando su ejército.

Amosis I aun siendo descendiente de los tebanos de la XVII, inició dinastía por ser considerado el UNIFICADOR del país.

AMOSIS I.

Su victoria sobre los hictos se considera el comienzo del Imperio Nuevo, un periodo de 500 años que marcó el apogeo del poder y la prosperidad de Egipto. Amosis I restableció Tebas como capital del país. Concedió cargos importantes de oficiales reales y gobernadores a los comandantes que le habían servido fielmente y reafirmó su control sobre el rival de Egipto al sur, Nubia, saqueando sus vastas reservas de oro, fortaleciendo el tesoro egipcio y expandiendo el comercio. Cuando murió, su pueblo lo deificó.

Amosis I logró un Egipto próspero y seguro. Inauguró una nueva era de cultura egipcia y allanó el camino a los poderosos faraones del Imperio Nuevo, que lo ampliarían y dejarían un legado arquitectónico asombroso.

Expulsó a los hicsos, continuando su progresión hasta la franja de Gaza, cuestión de gran importancia económica y estratégica, al ser el paso de Egipto hacia el norte de Asia. Su hijo Amenhotep I y el hijo de éste, Tutmosis I continuaron las conquistas llegando hasta Nubia por el sur, y por el este hasta el Eúfrates, conquistando Canaán y Siria. Además del oro, piedras preciosas y diorita de Nubia, se hizo con las minas de cobre y piedras preciosas en el Sinaí y de oro, pórfido y alabastro en el desierto próximo al mar Rojo.

Con estas riquezas y los tributos de los países sometidos, pudieron continuar su expansión militar, y realizar grandes obras de infraestructuras monumentales.

La legitimidad de un faraón se conseguía con el matrimonio de éste con su hermana, pero durante la XVIII dinastía no hubo en casi ningún caso descendencia masculina de los matrimonios entre hermanos, así que para lograr varones utilizaban esposas secundarias. Esto ocurrió con Tutmosis I, II y III, y tras la muerte de Tutmosis II sin descendencia “legítima masculina” -aunque había nacido Tutmosis III de esposa secundaria-, su tiastra HATSHEPSUT de sangre más pura -ya que era hija del faraón Tutmosis I y su hermana y esposa principal-, con el apoyo de la clase sacerdotal de Amón, se proclamó faraón y lo fue hasta su muerte durante 15 años (1473 a.C-1458 a.C.), reinando durante un período de paz grandioso en lo económico y artístico, aunque no fue mujer de armas; ella mandó construir la obra maestra del complejo funerario de Deir-el-Bahari.

Deir-el-Bahari

Tras la muerte de Hatshepsut, su sobrino Tutmosis III fue coronado faraón, mandando eliminar de todos los monumentos cualquier referencia a su tía, hermanastra de su padre Tutmosis II.

HATSHEPSUT

Tutmosis III.

Durante el reinado de Tutmosis III  Egipto vivió una de las épocas de mayor esplendor, con una veintena de expediciones militares, todas exitosas, llegando hasta Creta, Chipre y las Cícladas por el norte y hasta la cuarta catarata en Nubia.

Sus sucesores mantuvieron este estado de cosas hasta la llegada de Amenoptep IV -el rey poeta y cismático-, en 1372 a.C. Sin libertad para gobernar por las presiones del clero de Amón, el faraón reemplazó la religión de Amón por la de Atón –dios del disco solar-, para cuya adoración bastaba el propio sol. Cerró los templos de Amón y dispersó a los sacerdotes, abandonando Tebas, estableciéndose y fundando una nueva capital Ajhetaton (el horizonte de Atón) -hoy Amarna- y cambiando su nombre por Akhenaton (esto le agrada a Atón) junto a su mujer Neferu Aton Nefertiti (la bella ha llegado o que viene).

Amenoptep IV y Nefertiti.

Nefertiti.

Este cambio no duraría mucho, ya que su joven -menor de edad- y famoso heredero Tut-anj-Atón, bajo la regencia del visir Ay y de su madre Nefertiti, cambió su nombre por Tutankamón, volviendo a la religión de Amón, en alianza con los sacerdotes, restituyendo Tebas como capital. Este faraón muerto a los 18 años de edad y cojo, no ha sido conocido por la grandeza de su reinado sino por haber sido encontrada su tumba sin violar y con todos sus tesoros indemnes, por Howard Carter en 1922.

Imagen de oro de Tutankamon encontrada en su tumba.

Aquí termina la XVIII dinastía y comienzan las XIX Y XX llamadas Ramésidas. A partir de Tutankamón, el país se fue hundiendo en la anarquía, hasta que el poder fue tomado por los militares: Horembeb, Ramses I -militar profesional- y luego Sethi I, para llegar a Ramses II “El Grande”, quien guerreó sin tregua contra los hititas, manteniendo con ellos una batalla en Kadesh de resultado ambiguo, ya que ambas partes celebran en sus monumentos la gran victoria. Reinó 67 años y construyó monumentos colosales que manifestaran su grandeza, para gloria suya y de su esposa Nefertari –bella entre las bellas-: Abú Simbel en Nubia, y en Tebas reconstruyó templos y construyó nuevos (Karnak y Luxor). Su capital dinástica estuvo en Pi-Ramsés, en la frontera entre Asia y África –donde estuvo Avaris capital hicsa– aumque la política y administrativa continuó en Tebas. Hizo que en Abú Simbel se le representara sentado entre los dioses como uno más. A partir de la muerte de su hijo Mineptah, comenzó un gran declive, que aunque a veces se mantuvo estable como en la época de Ramses III, se sucedieron faraones ramésidas en la XX dinastía hasta Ramses XI, manteniendo guerras contra los pueblos del mar –teresh, shardana, ekwesh, sheshelesh y lukka- y a la guerra religiosa de los Impuros, que condujeron a la tercera época intermedia.

Detalle de la cabeza de la estatua colosal de Ramses II en Menfis. Debajo la estatua yacente.

ABU SIMBEL.

Interiores en Abu Simbel.

Con la cruz ansada, símbolo de la vida.

Ramses II cazando un nubio, un sirio y un libio.

Nefertari, la mujer de Ramses II.

TERCER PERÍODO INTERMEDIO: 1070 a.C. a 664 a.C.

Aproximadamente desde 1070 a.C. a 664 a.C.  desde la XXI a la XXV dinastías, inicialmente con capital en Tanis en la 1ª ETAPA TANITA -dinastía XXI-, cerca de Pi-Ramses y Avaris.

2ª ETAPA LIBICA: dinastías XXII, XXIII y XXIV con diferentes capitales: BUBASTIS -XXII-, LEONTÓPOLIS -XXIII- y SAIS -XXIV-.

En esta época, el poder fue pasando de unas dinastías a otras superpuestas.

3ª ETAPA KUSHITA O NUBIA con capital en Napata, en Sudán. (Los faraones negros).

Después, llegó el Período Tardío.

Música: Giovanni Battista Pergolesi. Stabat Mater. Parte 2.

To be continued in part 3.